viernes, 20 de octubre de 2017

LOS AUTORES DE LOS INCENDIOS (II)


Otro sector de la población que también planta fuego, son los sujetos que sufren de piromanía. 
Es una enfermedad psicológica, un trastorno perteneciente al grupo de "falta de control de impulsos". Las personas pirómanas, sienten gran excitación y pasión por el fuego, y todo lo relacionado con el mismo, cómo generarlo, activarlo, observarlo, y disfrutar con ello.
Conviene diferenciarlo de las personas incendiarias. Los pirómanos también tienen abundante ira y rabia, sufren sentimientos de soledad, tristeza y les da por quemar lo que pillan, iniciando fuegos. 
Es una forma de conseguir excitación, placer y a la vez curiosidad. Como si ante el fuego efectivamente pierden el control y se vuelven locos por ello. 
En general la motivación para hacerlo, es su relación de atracción por el fuego, verlo, como si las llamas y el fuego tuviera un imán para estas personas. Los síntomas que presentan son, la urgente necesidad de relacionarse con lo que tenga que ver con el fuego. 
La necesidad de incendiar y producir fuego de forma intencionada. Suelen sentir una agitación, pasión y activación emocional fuerte y les gusta y sienten placer de encender, observar su fuerza, las llamas, y todo lo que el fuego destruye a su paso, y en conjunto admirar el proceso del incendio. 
Se diferencian de los incendiarios que actúan con más cálculo y en la piromanía no suelen planificarlo, más bien es sobre la marcha y de forma poco organizada, bajo un estado de conciencia alterado y como en trance, tratando de llenar su vacío existencial y aburrimiento.  
Sí pueden ser conscientes a veces de lo que hacen, si bien quitan valor a las consecuencias de la quema. Disfrutan ayudando a apagarlo, en el medio de la actividad de los bomberos, colaboran con los paisanos y viviendo con gran excitación todo lo que se activa en el contexto del incendio. 
El perfil suele ser de un varón, que sufre importantes desequilibrios emocionales, con una historia decepcionante de frustraciones. También tienen otras patologías psiquiátricas. 
El consumo de alcohol o drogas pueden ser desencadenantes. Aún así, con esta complejidad de los autores, el trabajo conjunto de la sociedad puede dar resultados.