Los abrazos frecuentes reducen la frecuencia cardíaca, y la presión arterial.
Estimulan los niveles de oxígeno en sangre que circulando por todo el cuerpo, este se rejuvenece, y aumenta la producción de glóbulos blancos.
Fortalece el sistema inmunológico, se incrementa el grado de salud general.
Por ello, las personas que no los tengan o no puedan conseguirlos, tendrán más problemas en general en todos los factores expuestos y dado el valor de los abrazos, parece que es esencial reflexionar y conseguir tenerlos en las vidas... Cuantos....?