miércoles, 15 de agosto de 2018

SUPERAR LOS CELOS, UNA NECESIDAD (I)


La persona celosa padece sentimientos y estados de ansiedad y sobre todo mucho miedo a perder a la pareja que tiene y “posee”, o así lo cree. 

Sufre gran desconfianza y sospecha permanentes, que le llevan a infinitud de preguntas y comprobaciones, discusiones y conflictos frecuentes. 

Esta situación deteriora irreversiblemente la relación, pues la pareja lo vive como un acoso y no suele soportar esa presión. 

Para el celoso, la vida se vuelve una locura con esos pensamientos obsesivos y paralizadores, con temor a perder a la persona que “cree que ama”, se vuelve muy controlador y prácticamente tortura al otro, con su confusión y caos, (Jacques Cardonne denominaba a los celos, “el vicio de la posesión”). 

La persona celosa no es que esté más enamorada o lo suyo sea un inmenso amor, más bien es una persona enferma psicológicamente, muy preocupada por sí misma, sin importarle hacer daño a la persona amada. 

Predomina la inseguridad, baja autoestima, terror a la soledad y también se ha descontrolado su necesidad de posesión del otro, no ha aprendido a tener unas relaciones democráticas donde ambos participan, es una persona que tiene que dirigir y mandar. 

A veces los estados de celos ni siquiera se producen por la pena de perder a la otra persona, sino por el qué dirán...(SIGUE)...