Ocurre en algunas ocasiones que la pareja se haya dado un tiempo para pensarlo, o que se habían dejado y luego vuelven, que como haya habido durante ese paréntesis, alguna relación con un tercero, si se lo cuentan a la persona celosa, se convierte en realidad en el principio del fin.
Parejas muy bien avenidas y felices que llegado un momento se han contado esas intimidades, han producido literalmente la ruptura de la pareja.
Desconfianza plena y total, control exhaustivo y exigencias continuadas. Ello va minando la armonía y la felicidad del encuentro se convierte en broncas, el cariño y la ternura, y los sentimientos armónicos desaparecieron.
Las actitudes del enfermo celoso atentan contra la autonomía del otro y la falta de tolerancia lo convierte en un tirano...(SIGUE)...