A lo largo de la vida, en un momento u otro surgen problemas, dificultades e imprevistos a los que irremediablemente hay que hacerle frente. Lo principal es no perder la cabeza, perplejos y bloqueados por la angustia y la ansiedad, el conjunto de temores y sensación de desbordamiento pueden paralizar al sujeto y no ver salida de ninguna forma, con el pánico todo parece mucho más grave e irresoluble, se ven montañas donde no las hay.
Pensar en positivo y motivarse así mismo es crear una condición de mucha energía y fuerza. Permitirse decir "sí puedo", recordar otros logros de la vida, mantener la coherencia mental, la calma y la serenidad potencian los recursos de cada persona, ampliando la mente y desarrollando procesos de pensamiento dirigidos a soluciones.
Conviene analizar por partes y diseñar fórmulas para conseguir solucionar cada parte, tanto con medidas conocidas como aplicando nuevas estrategias. Se sugiere también pensar de formas nuevas, llamado en psicología pensamiento lateral, imaginándose en la distancia, abordando la situación desde múltiples posiciones y perspectivas.
El gran tenista Rafa Nadal es el ejemplo cercano de fuerza y superación mental, cada problema le sirve para crecerse y desarrollar nuevas dinámicas de acción. El fracaso solo son datos e información del camino o vía que no conviene seguir, con ello los errores suelen convertirse en importantes fuentes de aprendizaje. Después de generar el pensamiento positivo y una actitud de fuerza, ver siempre el vaso medio lleno y/o diseñar la estrategia para buscar agua en otra parte ¡¡¡. Con flexibilidad observando la aplicación de los planes y resultados parciales, un día y otro, se va consiguiendo ver mejorar la panorámica.
Todas estas pautas convergen y ayudan para el logro de soluciones. En situaciones difíciles donde uno se encuentra en el fondo del pozo también está la ayuda de profesionales de psicología que al fin, están acostumbrados por su especialidad y formación, así como por su experiencia clínica, a tratar con múltiples personas con diferentes formas de pensamiento y sí pueden ayudar trabajando juntos, primero a que el sujeto se estabilice emocionalmente y después a sacar lo mejor de esa persona para así llegar de forma más eficaz a la meta.
Pensar en positivo y motivarse así mismo es crear una condición de mucha energía y fuerza. Permitirse decir "sí puedo", recordar otros logros de la vida, mantener la coherencia mental, la calma y la serenidad potencian los recursos de cada persona, ampliando la mente y desarrollando procesos de pensamiento dirigidos a soluciones.
Conviene analizar por partes y diseñar fórmulas para conseguir solucionar cada parte, tanto con medidas conocidas como aplicando nuevas estrategias. Se sugiere también pensar de formas nuevas, llamado en psicología pensamiento lateral, imaginándose en la distancia, abordando la situación desde múltiples posiciones y perspectivas.
El gran tenista Rafa Nadal es el ejemplo cercano de fuerza y superación mental, cada problema le sirve para crecerse y desarrollar nuevas dinámicas de acción. El fracaso solo son datos e información del camino o vía que no conviene seguir, con ello los errores suelen convertirse en importantes fuentes de aprendizaje. Después de generar el pensamiento positivo y una actitud de fuerza, ver siempre el vaso medio lleno y/o diseñar la estrategia para buscar agua en otra parte ¡¡¡. Con flexibilidad observando la aplicación de los planes y resultados parciales, un día y otro, se va consiguiendo ver mejorar la panorámica.
Todas estas pautas convergen y ayudan para el logro de soluciones. En situaciones difíciles donde uno se encuentra en el fondo del pozo también está la ayuda de profesionales de psicología que al fin, están acostumbrados por su especialidad y formación, así como por su experiencia clínica, a tratar con múltiples personas con diferentes formas de pensamiento y sí pueden ayudar trabajando juntos, primero a que el sujeto se estabilice emocionalmente y después a sacar lo mejor de esa persona para así llegar de forma más eficaz a la meta.