Y es que las oportunidades para los encuentros de la pareja, tienen que crearse, hay que buscarlo.
Conviene dar la vuelta a toda la situación y considerarlo en la vida personal como una función más del día a día...
La gente también puede planificarse con mil justificaciones para el "sí lo quiero, sí puedo, y sí lo tengo"...
Las carencias en las relaciones, limitan la evolución de la pareja que permanece estancada en esa problemática, y le resta de otras experiencias vitales:
-Descubrir nuevos horizontes,
-Practicar otros deportes y experiencias,
-Nutrir su profesión con otros cursos, complementos, avances...
-Interactuar con la gente a otros niveles de seguridad y realización.
El estancamiento en la dimensión sexual, al fin estancamiento en el progreso personal y relacional, genera tantas limitaciones, que puede afirmarse que termina en enfermedades mentales y físicas.
Nada hay más seguro, poderoso y bello, que apostar por la vida, apostar por la materialización del amor y de la abundancia...