Ya lo sabías...?
Es tu relación con la comida lo que te impide despedirte de esos kilos.
Es tu delicadeza, tu control, tu ansiedad, tu vehemencia lo que te hace de interferencia para permanecer encerrado en tú descontrol.
Aprender a disfrutar y no castigarte.
A valorar tus tiempos de nutrición y placer.
Entender tu vida como un conjunto y no fraccionada.
Apreciar el escucharte a ti y no negar la atención a los momentos en los que tu cuerpo te habla.
Diseñar una vida de calidad, cultivando los placeres y no solamente las obligaciones.
Cultivar tu amistad con el arte y apartarte del esperpento...
Es en todo ello, en todo eso que está ocurriendo en tu mundo emocional, donde la psicología te ayuda a tomar la organización y el manejo de esa relación esquizofrénica, de amor y odio, de rebeldías y autosabotajes...