martes, 16 de abril de 2013

SEXUALIDAD: EL ÉXITO EN LAS RELACIONES



La sexualidad responde al puro deseo de amar, de compartir afecto, ternura y cariño, de sentir placer, de gozar, de abrazarse a la persona querida.
Las facetas personales básicas para poder compartir mejor las relaciones, entre otros aspectos, están en relación con:

            Autoconciencia o autoconocimiento emocional: es fundamental reconocer los propios sentimientos y emociones para comprenderse mejor a uno mismo y poder tener mejor manejo sobre ellos, sobre la propia vida y sobre las relaciones personales y sociales. Las personas que poseen una elevada consciencia emocional, están en contacto con sus señales interiores y reconocen el modo en que sus sentimientos les afectan y acaban influyendo en su comportamiento. Con ello pueden ver la imagen global de una determinada situación compleja e intuir así el curso de acción más adecuado. Pueden ser personas más auténticas, compartir abiertamente sus emociones y con ello conseguir relaciones humanas y de pareja de mayor calidad.

            Autocontrol emocional: es la capacidad de controlar los sentimientos y/o emociones adecuándolos a las circunstancias y desarrollando mayor sensibilidad en el trato con “el otro”, sabiendo gestionar y encauzar adecuadamente sus emociones e impulsos perturbadores. Ello proporciona serenidad y lucidez para afrontar una situación estresante y permite permanecer imperturbable ante situaciones críticas.

            Automotivación: todos pueden aprender a tener un pensamiento positivo. Manejar las emociones y subordinarlas a un objetivo a corto, medio o largo plazo, es una clave para mantener la atención, la motivación y la iniciativa y la creatividad en la pareja. Las personas optimistas saben afrontar las circunstancias adversas, considerándolas como oportunidades. Observa los aspectos positivos de la pareja y espera lo mejor. Consideran positivos los cambios que les depara el destino.

            Empatía: capacidad para reconocer las emociones y sentimientos ajenos  y ser capaz de ponerse en el lugar del otro. Ello es muy útil para construir relaciones personales y sociales realistas y duraderas. Cuando se conecta con un amplio abanico de señales emocionales, facilita experimentar las emociones que siente otra persona. Permite saber escuchar con atención y comprender la perspectiva del “otro”. La empatía posibilita a la persona llevarse bien con los demás. Las personas empáticas saben generar un clima emocional adecuado para establecer una buena relación con la pareja.
           
            Adaptabilidad: para adaptarse a diversas situaciones sin perder la concentración o la energía. Afrontan con facilidad las nuevas circunstancias, adecuándose a los cambios y no tienen problemas en cambiar de opinión, cuando lo exigen los nuevos datos o realidades. Ello favorece la gestión de conflictos que se puedan presentar en la pareja, articulando un ideal común, encauzando la energía de un modo constructivo.

            Habilidades sociales o capacidad para las relaciones interpersonales: se trata de unos comportamientos básicos para establecer relaciones positivas con los demás, con la pareja, con la gente que nos rodea y especialmente con la que hay que tratar habitualmente.

            Valoración adecuada de uno mismo: esta competencia permite a la persona reconocer sus fortalezas y sus debilidades (incluso para reírse de sí mismo). Con ello se pueden mejorar los aspectos que se desean cambiar y se admite la crítica y el feedback constructivo. La valoración adecuada de uno mismo posibilita saber cuando se necesita pedir ayuda y dónde centrar la atención para cultivar nuevas habilidades.

            Re educación emocional. Terapia psicológica: Aunque pueda parecer que cuando el sistema emocional aprende algo jamás podrá olvidarlo, la capacidad emocional no es algo rígido, sino susceptible de mejorar con un aprendizaje adecuado.


Con técnicas psicológicas se puede conseguir desarrollar habilidades sociales y personales; control de emociones negativas como los arrebatos de cólera y otras emociones destructivas, tanto para el que las vive como para las personas de su entorno; entrenamiento para el pensamiento positivo; desarrollo de la empatía, de la flexibilidad, del respeto a la pareja y a uno mismo. Remodelar hábitos emocionales arraigados  en la infancia e incluso rasgos de carácter problemáticos.

*DEL ESTADO DE ÁNIMO
*DE LA CAPACIDAD DE VIVIR EL PRESENTE
*DE LA CREATIVIDAD
*SI TIENEN UN PROYECTO COMÚN Y COINCIDEN EN ALGUNAS *AFICCIONES Y GUSTOS
*PENSAMIENTOS
*SENTIMIENTOS Y AFECTIVIDAD
*CAPACIDAD PARA LAS RELACIONES
*AUTOIMAGEN Y AUTOCONCEPTO
*DE LAS EXPECTATIVAS QUE CADA UNO TENGA DE LA VIDA
*SI SABEN DISFRUTAR DEL SEXO
*DEL POTENCIAL DE CONSTRUCCIÓN DE LA VIDA

*EN CONJUNTO, En función de la propia satisfacción personal.