El estrés te roba la vida. Sin darte cuenta, progresivamente se va instalando en tu forma de vivir, tu forma de actuar, tu forma de relacionarte y tu forma de ser.
Lo impregna todo. Y lo peor que la gente no es consciente. Hasta que se le presentan enfermedades. Hay algunas enfermedades que son reversibles, uno está a tiempo para cambiar de vida.
Otras veces no, como un infarto o un derrame cerebral. O un accidente.
En otras ocasiones se presentan problemas muy serios, en el trabajo, con la gente, con familiares... Y también, pueden ser reversibles, o no.
Y si algún poder se necesita en la vida, es el ser conscientes, para organizala, dirigirla y controlarla para mejores resultados.
La vida implica una serie de ritmos que conviene coordinar con los de las otras personas, con el trabajo, con el contexto y así se vuelve para el sujeto en una serie de desafíos a superar.
En las personas se convierte en un arte y en una capacidad que se va desarrollando más o menos según las propias fortalezas...(SIGUE)...