Estar enganchado implica perder la voluntad, el control de organizar y dirigir los tiempos en la vida, perder la oportunidad de decidir, estar alienado un día tras otro.
Sentir que uno tiene otras actividades que hacer y que le interesan en su vida y no puede dedicarse a ello pues el enganche no se lo permite.
Le tiene esclavizado, cada día no puede elegir sus tareas, el imán que tiene el enganche le impide atender a todas las funciones vitales y todo el conjunto del ser.
Puede ser que le quita del sueño, de atender a sus necesidades como alimentarse, del trabajo, de las relaciones, del estudio.
O le quita el dinero y su energía.
Siente que puede con uno y es el sometido. La víctima. Cuanto antes mejor: salir del enganche, de la adicción.
Sentir que uno tiene otras actividades que hacer y que le interesan en su vida y no puede dedicarse a ello pues el enganche no se lo permite.
Le tiene esclavizado, cada día no puede elegir sus tareas, el imán que tiene el enganche le impide atender a todas las funciones vitales y todo el conjunto del ser.
Puede ser que le quita del sueño, de atender a sus necesidades como alimentarse, del trabajo, de las relaciones, del estudio.
O le quita el dinero y su energía.
Siente que puede con uno y es el sometido. La víctima. Cuanto antes mejor: salir del enganche, de la adicción.