Tal vez haya sido de forma planificada, con organización y de mutuo acuerdo...!
O en cambio ha sido de manera dramática, con enfados, discusiones...!
Entre adultos todo es posible, la variabilidad humana alberga todas las opciones. El mayor cuidado conviene ponerlo cuando hay hijos.
Es muy normal que ente personas adultas y responsables, cuenten con ser educados para darles una aceptable calidad de vida a sus niños.
Hay preferencias en la vida para todo y en múltiples facetas uno tiene total libertad e independencia para elegir lo que uno prefiera o guste, y no hay problemas.
Sin embargo, cuando es necesario cultivar la mejor relación con los pequeños, a consecuencia de la implicación emocional y la responsabilidad, es interesante esforzarse y dedicarles una actitud civilizada.
Y es que aunque entre las familias políticas no tengan fuertes lazos e incluso se caigan peor, el mantener unas actitudes sencillamente civilizadas, sin esforzarse demasiado, ya es suficiente.
Nadie está obligado a dar saltos de alegría a ver a la familia del/la ex, pero sí pueden dar prioridad al bienestar de los hijos, y mantener el tipo.
Lo mejor será que hablen entre los padres para crearles momentos de bienestar...