La gente responsable y comprometida con la vida, aprende a cuidarse con el objetivo de ser más competente y más feliz. La enfermedad a cualquier nivel, perjudica no solo al sujeto que lo padece, sino también a su familia y entorno.
Los autocuidados, forman parte de la autoestima, y cuidar de la salud sexual, beneficia a todo el ser.
Por ello la sociedad al ofrecer tratamientos a los ciudadanos, cumple con los derechos de la atención a la salud sexual, en todas las etapas de la vida, y otras circunstancias que les puedan surgir.
Y tienen una gran importancia, tanto para la educación y prevención de la salud sexual, como para el tratamiento de las disfunciones sexuales, los trastornos sexuales, las preocupaciones y los problemas que les puedan surgir.