Dicen que cuando a la gente le irrita algo de otros, y le genera un conjunto de emociones negativas, se debe a que no tienen sanadas esas partes de su interior.
Es muy difícil de aceptar todo esto, ya que las personas no suelen ser conscientes, necesitan trabajar en su mundo interior para poder identificarlo.
Y es que lo "no aceptado" de sí mismos, lo suelen proyectar sobre los demás, lo juzgan y condenan.
Todo lo anterior puede ser un gran regalo para la gente cuando aprenden la lección. Considerar a la otra gente como personas que están ahí como maestros, para hacernos aprender.
En vez de tomarlo todo a nivel personal, es mejor reflexionar, explorando el interior y tratando de entender esos procesos, y solucionar en lo posible, comprender y seguir...