miércoles, 8 de marzo de 2017

FOBIA SOCIAL (TAS) (VII), ETIOLOGÍA


El componente central de las fobias es el miedo y si bien es cierto que el miedo tiene una función protectora, al servicio del instinto de supervivencia, cuando se convierte en excesivo, puede llegar a bloquear las vidas y a incapacitarlas en múltiples facetas.

Es fácil que se desarrolle la fobia social en gente con su "sí mismo" más frágil, bien por un tipo de educación demasiado autoritaria, sobreprotectora, crítica, con hábito de juzgar constantemente y hacer sentir culpables a los hijos, con demasiada agresividad u hostilidad.

Y también en personas que hayan sido víctimas de acoso:

-Acoso escolar,

-Acoso laboral, 

-Acoso de pareja, 

-Acoso familiar,

-Acoso de amigos,

-Acoso por algún grupo o sector de población.

-Acoso sexual.

Cuando estas personas pasan por situaciones temidas, se les desarrollan crisis de ansiedad.

Posteriormente al quedar en la memoria esa situación vivida de ansiedad, desarrollan un miedo y ansiedad anticipatorios que les produce importante malestar y les impide dar los pasos, avanzar y solucionar su fobia.

En otros casos se instaura una fobia social, por el estrés postraumático, en personas que han vivido situaciones límite y han desarrollado la fobia posteriormente.

También puede desarrollarse cuando el sujeto ha tenido alguna experiencia negativa en situaciones con gente o lugares públicos, como haberse confundido, haber cometido errores, en situaciones en las que han sentido la posibilidad de juicios negativos hacia ellos.