Es el sentimiento, la emoción de devolver a la persona que ha ayudado, una correspondencia de agradecimiento, un cariño, una estima.
Es una actitud natural en la mayoría de las personas de regalar algo bueno a quienes les han hecho un favor o contribuido a algo positivo en la vida de un otro, un agradecimiento, una correspondencia.
Las personas que desarrollan ese sentimiento de gratitud, según la psicología, viven más felices:
-Al ser más agradecidas tienen un potencial mayor para el bienestar, sintiéndose más positivas y optimistas.
-Sienten mayor aceptación y valoración de sí mismas, con más autoestima, más generatividad y capacidad de resolución de sus problemas diarios.
-Van a estar menos estresadas y menos depresivas. Y piensan menos en lo negativo, siendo probable que se centren más en soluciones.
-También se encontró en los perfiles de las personas agradecidas, su capacidad para afrontar mejor los cambios.
Hoy se sabe que el ser agradecidos y cultivar la gratitud, tiene un importante valor. El ejercicio de reflexión de pararse a reconocer con frecuencia, todo por lo que pueden estar agradecidos en la vida, la desarrolla aún más. Incluso escribirlo, cada uno a su manera, es un ejercicio fantástico para la mente.
Hay un dicho: "Quién no maneja el lenguaje del agradecimiento..., nunca podrá saludar a la felicidad..."