Es un tipo de preocupación, agobio y estrés, causado por el dinero, unos la sufren al tener poco, y los que tienen más por miedo a no saber invertir o a perderlo.
Según T. Robbins la presión financiera, a veces, ha arruinado a mucha gente.
Y es que una persona desequilibrada con uno o varios problemas como la envidia, la avaricia, paranoia, mentiras y engaños, pueden llegar a transformar la vida y perder a la gente que ama.
Hay muchas personas que cuando van teniendo más dinero, pierden a los amigos, bien sea por envidia, o por sus complejos de inferioridad, puesto que se sienten desplazados y van evitando al que tiene más.
Y otras veces en la gente cercana crea un resentimiento y se llegan a poner como rabiosos en el caso de que ellos no hayan sabido conseguirlo.
También en las familias parece que cuando un hermano gana más que los otros, es probable que los demás sientan que les deben algo, y comienzan a pedir e incluso malgastar para seguir pidiendo al hermano con más dinero.
Tampoco la persona que ha ganado más se tiene que convertir en mala persona por ello. En resumen, diversidad de situaciones que generan problemas para todos los implicados y que conviene resolver para disfrutar de una vida más feliz.
La coordinación de todos los factores de la vida, la armonía y el equilibrio, sirven para cualquier elemento que configure la realidad de cada persona.
Se trata de mantener la mente en estado positivo, tomando las riendas y el control de la gestión monetaria.
E igualmente para mantener las relaciones con el resto de la gente desde la plenitud de recursos.
Cuánta complicación ocasionaría en las vidas el tener mucho dinero y después una gran escasez de recursos personales para las relaciones familiares, amigos, con la gente y la convivencia en general...?