Algunas veces te gustaría decir sí a todos, incluso pasando tú al último lugar, y eso no te conviene.
Dicen que del amor es de lo único que uno no se vacía, al dar se multiplica.
Sin embargo la gente tiene sus vidas, sus limitaciones de tiempos y energía, sus necesidades y es imprescindible priorizar.
La gente que siempre dice sí, puede enfermar.
Se está convirtiendo en alguien que no desea, quién sabe, tal vez por intentar gustar a otr@s.
Cuántas veces la gente regala sus tiempos y sus energías y luego no tienen para aplicarlo a sus propias responsabilidades, convirtiéndose en un problema para ellos.
Te interesa mucho anticiparte y comprender que si lo que das no servirá para aportar a tu vida calidad, satisfacciones y bienestar, mejor decir NO.
En realidad tienes múltiples oportunidades para el SÍ, por ello si algo es NO, evita sentirte culpable por ello.
Por qué cuando desde tus sentimientos deseas decir NO, tienes que decir SÍ...?