Si eres realista vas a ir comprendiendo gradualmente que tu felicidad no depende de otros. Si piensas así, tu sufrimiento se multiplica.
Siempre andarás errante, frustrad@ y decepcionado encontrando las limitaciones de los demás, sin haber trabajado las propias.
Nadie es perfecto y la vida tampoco lo es. Por ello pasar tiempo y tiempo con la expectativa de que los demás tienen que contribuir a la propia felicidad, es el camino equivocado.
La clave fundamental es centrarse en los valores y entregar las mejores energías para crear paz, amor, concordia, comprensión, tolerancia, compasión, agradecimiento.
Dónde y cómo se esté, y siempre que la gente lo desea, tiene oportunidades.
Dicen que los humanos pasan sufriendo media vida intentando gustar a los demás y la otra media vida sufren por la ansiedad que los otros les producen.
Es muy urgente dejar de jugar al juego de los "otros" y trabajar más el sí mismo. De lo contrario pierdes tu vida.
Si te importa tu vida y deseas contribuir al bien de la humanidad, entra en ti mismo, trabaja en tu interior y sabrás así aportar lo mejor de para la evolución de la sociedad.
Y el principio básico, es sencillo, nadie puede dar lo que no tiene...! Cultivando tu ser, sí tendrás para compartir......