En la falta de control de esfínteres se da la enuresis cuando el sujeto no ha conseguido el control vesical continuado, sino que una vez conseguido, vuelve a tener micciones incontroladas, como en meses atrás.
Suelen conseguir el control en general sobre los 3 años. A veces se prolonga unos meses o un año más. Incluso en ocasiones hasta los 6.
Los niños cuando son conscientes de que se les escapa de nuevo, o se despiertan mojados, se preocupan y suelen sentirse mal, con la angustia de que algo no correcto está ocurriendo en ellos.
En estas circunstancias tardías, que pueden ser más o menos normales, son los niñ@s los que se pueden acomplejar y generarles problemas de autoimagen negativa, que repercute en su autoestima y les dificulta el desarrollo de la confianza.
En general suele ser más frecuente en niños.
Puede ser enuresis diurna o nocturna, y primaria o secundaria.
Descartando causas anatómicas o fisiológicas, la terapia psicológica suele dar muy buen resultado.
Suelen conseguir el control en general sobre los 3 años. A veces se prolonga unos meses o un año más. Incluso en ocasiones hasta los 6.
Los niños cuando son conscientes de que se les escapa de nuevo, o se despiertan mojados, se preocupan y suelen sentirse mal, con la angustia de que algo no correcto está ocurriendo en ellos.
En estas circunstancias tardías, que pueden ser más o menos normales, son los niñ@s los que se pueden acomplejar y generarles problemas de autoimagen negativa, que repercute en su autoestima y les dificulta el desarrollo de la confianza.
En general suele ser más frecuente en niños.
Puede ser enuresis diurna o nocturna, y primaria o secundaria.
Descartando causas anatómicas o fisiológicas, la terapia psicológica suele dar muy buen resultado.