Es un tipo de amor en el viven los dos como una misma vida, en el sentido de que van juntos a todo, saben a cada minuto lo que el otro hace, a dónde va o viene, y así en una dinámica en la que no tienen un espacio diferenciado, propio.
En muchas personas llega a ocurrir que incluso se sienten como si tuvieran la posesión del otro, y más grave aún que no le perciben como una entidad separada.
Las personas por definición, tienen derecho a sus diferencias, a sus experiencias propias y cuando esas vivencias no existen, sufren. La fusión no es precisamente la autorrealización, es contrario.
Y en este tipo de amor fusionado, ambos, al menos en una etapa, viven como lo mejor que les podía haber ocurrido, en un sistema cerrado.
Y a veces esto no para ahí, necesita un movimiento, una transformación que la misma vida les traerá.
El proceso de fusión continuada, acaba en una pérdida de identidad, y son ambos los que sufren las consecuencias de la falta de autonomía, la independencia del pensar, el sentir, el hacer, el hablar.
Lo común es que uno de los dos tenga más personalidad, y el otro se acomode, perdiendo de su vivir y su sentir. En este caso, el de más fuerza se verá asediado, por el otro, y la continua persecución que sufrirá, generará problemas, sintiéndose incómodo y tratará de gestionar su propio espacio.
Y continúa la espiral de la atadura, ya que el más dependiente ve amenazado su conexión, e incrementará su control, y se angustiará, ya que su sueño es estar pegado.
También lo pasan mal cuando la pareja manifiesta puntos de vista diferentes, nuevos, o no esperados. La pareja se asusta y genera su miedo, como una amenaza, pensando en los graves problemas, si se diera la opción de que las diferencias crezcan y la pareja rompa.
El futuro de esas parejas a veces no ayuda, y las fusiones explotan, surgiendo una variedad de conflictos o desencadenantes patológicos.
En estos casos, cuando surjan los conflictos, la solución sería la Terapia Psicológica de Parejas, ayudarles a desarrollar su autonomía y crecer para cultivar sus propias personalidades. Es la forma en la cual la fusión se transforma a una modalidad de pareja más evolucionada para más satisfacción de ambos.