martes, 14 de octubre de 2014

LAS PAREJAS Y LA SUEGRA / COPLES & THE MOTHER IN LAW (I)



Es cierto que en las diversas culturas, las relaciones suegra y familia del hijo, sean muy diferentes. En algunos países, aparece una constelación muy especial en estas relaciones. De tal forma que hasta hace unos años, y aún hoy en día, muchas discusiones, problemas e incluso separaciones que surgen en la pareja, se deben a la intromisión de la familia política.

Los límites, conviene tenerlos en cuenta, ya que la nueva pareja que se forma, tienen unos tiempos, espacios y actividades conjuntos, y lo natural en cierto modo es que para ellos se convierta en una prioridad. No es que no quieran a sus familiares anteriores, sino que por el natural transcurrir de la vida, les ha llegado el tiempo de crear su propia familia.

Ello hay que respetarlo. Respetar el espacio al que tienen derecho propio, su espacio.

Y a veces la familia política, entre ellos la suegra, hace planes por su cuenta, propone reuniones familiares y actividades y parece que no tiene en cuenta los deseos de los demás. Y es totalmente natural que también tengan los suyos. Y en ocasiones, cuando le responden que están ocupados, no pueden o ya habían hecho otros planes, se molesta y mucho. Para esos momentos, se contraría y puede que no razone tan acertadamente.

Por qué le parece tan mal que en general tenga la pareja su propia vida, aunque haya a su vez espacio para los demás...?

Cómo puede ser que lance fechas para celebraciones sin contar con todos...?

Tiene que ayudar el hijo a las tareas de su casa anterior, abandonando a su familia actual, esposa e hijos...?

Produce mejores consecuencias coordinarse, dialogar y negociar, esos espacios y tiempos. A veces el hijo quiere y desea atender a todo y realmente está desbordado, no puede.

Ocurre muchas veces que el hijo se siente bajo presión, está entre la espada y la pared, si contenta a la madre, se enfada la esposa, y si hace lo que la pareja dice, se enfada la madre.

El problema se incrementa cuando el hijo no apoya a su esposa y sigue las propuestas de la madre sin rechistar. En esas condiciones la esposa se ve totalmente marginada y sufre porque él no es capaz de posicionarse a su lado, y porque no es capaz de poner a la madre en su sitio.

No siempre es tan fácil. Está en función de las relaciones previas madre-hijo. Cuando era una relación madura y evolucionada eso no ocurre. Sí en cambio es frecuente, cuando la madre siempre ha ejercido un dominio sobre ese hijo, culpándole si no era obedecida.

Y esa dinámica puede que esté presente ahora.  (SIGUE...)