Entre las maravillosas obras de la autora Elisabeth Kübler-Ross, se hallan sus reflexiones sobre la muerte. En realidad aporta unas valiosas reflexiones que lo que plasman y ayudan a superar el miedo "a la muerte". En algunas culturas parece que todo en el proceso de vida sea temer con horror a la muerte, y es lo que hay y abunda. En consecuencia cantidad de psicopatologías se desarrollan y múltiples sufrimientos de toda índole para los humanos. Pues sí, llega un momento de reflexionar y ampliar la mente una vez más.
La muerte ayuda y mucho a valorar la vida. Quien tiene la muerte presente en su vida, la vive con más plenitud, con más valor, sabe más estar en el aquí y ahora. Cuando la vida le plantea desafíos relativiza más todo y lo interpreta con una mayor sabiduría, es mucho más capaz de moverse en la amplitud todo. Saborea y se deleita con todos los placeres y disfruta con mil cosas más, la belleza de la naturaleza, de los animales y de los humanos, especialmente.
Amando a la muerte se "aprende a descubrir la vida", cualquier detalle es motivo de satisfacción y de alegría. Un ejemplo de ello, son estas personas que por alguna circunstancia se han visto de cara con ella. Personas que sufren cáncer u otras enfermedades. Se alegran con cada día que amanece, con cada situación. Ahora sí aprendieron a disfrutar, son una gran enseñanza para todos los que tienen a su alrededor.
El verse cerca de la muerte les hizo disfrutar de la vida, para ellos fue un regalo. Y así en otros tantos aspectos del fluir de la vida, el tener presente a la muerte hace a las personas disfrutar "a tope" de muchas circunstancias puesto que al valorar el aquí y el ahora, permite a uno estar agradecido con todo y sentir más placer en la totalidad de las actividades que uno esté realizando, si son de relaciones, o de trabajo o de fiesta¡¡ y sobre todo ayuda a que uno no le de vueltas a la cabeza torturándose con cientos de obsesiones cotidianas sin importancia.
Preguntar a las personas con trastornos obsesivos, sufriendo horrores, según en cada caso, quizás sí hasta con una mota de polvo o cosas por el estilo. Se lo aseguro, lo he escuchado en consulta muchas veces. Y para estas personas que sufren tanto, ello es un mundo, la mota de polvo, les angustia y les hace sufrir. De ahí que interesa y mucho aprender a relativizar y disfrutar con tantas y tantas personas, temas y situaciones.
El paraíso es este mundo y para disfrutarlo hay que transformar la estructura de la mente, tal y cómo se configuró en esta sociedad interpreta la muerte con mucho sufrimiento. Y la muerte es una gran enseñanza para la vida ¡¡
La muerte ayuda y mucho a valorar la vida. Quien tiene la muerte presente en su vida, la vive con más plenitud, con más valor, sabe más estar en el aquí y ahora. Cuando la vida le plantea desafíos relativiza más todo y lo interpreta con una mayor sabiduría, es mucho más capaz de moverse en la amplitud todo. Saborea y se deleita con todos los placeres y disfruta con mil cosas más, la belleza de la naturaleza, de los animales y de los humanos, especialmente.
Amando a la muerte se "aprende a descubrir la vida", cualquier detalle es motivo de satisfacción y de alegría. Un ejemplo de ello, son estas personas que por alguna circunstancia se han visto de cara con ella. Personas que sufren cáncer u otras enfermedades. Se alegran con cada día que amanece, con cada situación. Ahora sí aprendieron a disfrutar, son una gran enseñanza para todos los que tienen a su alrededor.
El verse cerca de la muerte les hizo disfrutar de la vida, para ellos fue un regalo. Y así en otros tantos aspectos del fluir de la vida, el tener presente a la muerte hace a las personas disfrutar "a tope" de muchas circunstancias puesto que al valorar el aquí y el ahora, permite a uno estar agradecido con todo y sentir más placer en la totalidad de las actividades que uno esté realizando, si son de relaciones, o de trabajo o de fiesta¡¡ y sobre todo ayuda a que uno no le de vueltas a la cabeza torturándose con cientos de obsesiones cotidianas sin importancia.
Preguntar a las personas con trastornos obsesivos, sufriendo horrores, según en cada caso, quizás sí hasta con una mota de polvo o cosas por el estilo. Se lo aseguro, lo he escuchado en consulta muchas veces. Y para estas personas que sufren tanto, ello es un mundo, la mota de polvo, les angustia y les hace sufrir. De ahí que interesa y mucho aprender a relativizar y disfrutar con tantas y tantas personas, temas y situaciones.
El paraíso es este mundo y para disfrutarlo hay que transformar la estructura de la mente, tal y cómo se configuró en esta sociedad interpreta la muerte con mucho sufrimiento. Y la muerte es una gran enseñanza para la vida ¡¡