Por las investigaciones y práctica clínica de la psicopatología y las enfermedades psicosomáticas, hoy en día se sabe que las enfermedades de las manos y los dedos, tienen en la mente su correspondencia mental, como el resto del cuerpo, y representan los esquemas, valores, y actitudes disfuncionales que esa persona tiene para configurar su mundo y su vida, organizarlo y responder a él, probablemente de una forma errónea que le hace infeliz.
Las manos representan la dinámica del hacer, el agarrar, soltar, manejar, aferrarse, acariciar, amar, dañar, pellizcar. Y los dedos representan a su vez formas de posicionarse en los detalles de la vida, y cuando estos dedos están enfermos, también lo están los esquemas que la persona ha elaborado en función de cada aspecto de su recorrido vital.
En el caso de enfermedad en las manos, son la materialización de los esquemas mentales erróneos que están dificultando la vida de las personas y que le están llamando la atención para que cambien su forma de ser a otra manera más evolucionada que les haga más felices, por ej. cómo se aferran a las experiencias?, cómo sujetan y mantienen?, cómo dirigen las situaciones y las manejan? En realidad es una metáfora de cómo la persona maneja su realidad, cómo afronta sus vivencias:
Castigando y agrediendo, duda permanente?, con dificultades para aferrarse o soltar, sí pero no, cuál es su dinámica predominante?
Los dedos artríticos, reflejan una actitud de crítica y resentimiento, de acusar y castigar. De no ser amados lo suficiente, sintiéndose víctimas en las relaciones y la vida.
La terapia psicología es personalizada para cada sujeto, y añadiendo los factores comunes para superar estos daños. En general para las enfermedades de manos y dedos, al sujeto le conviene trabajar la faceta del perdón, y superar la dependencia. Permitirse no aferrarse al pasado que ya no le sirve. Desarrollar confianza en sí mismo, y crecer en seguridad y decisión que le permita coger y soltar de forma fluida: personas, experiencias y circunstancias.
En resumen, conseguir llegar a dirigir y manejar su vida satisfactoriamente y sus vivencias con alegrías y satisfacciones...
Las manos representan la dinámica del hacer, el agarrar, soltar, manejar, aferrarse, acariciar, amar, dañar, pellizcar. Y los dedos representan a su vez formas de posicionarse en los detalles de la vida, y cuando estos dedos están enfermos, también lo están los esquemas que la persona ha elaborado en función de cada aspecto de su recorrido vital.
En el caso de enfermedad en las manos, son la materialización de los esquemas mentales erróneos que están dificultando la vida de las personas y que le están llamando la atención para que cambien su forma de ser a otra manera más evolucionada que les haga más felices, por ej. cómo se aferran a las experiencias?, cómo sujetan y mantienen?, cómo dirigen las situaciones y las manejan? En realidad es una metáfora de cómo la persona maneja su realidad, cómo afronta sus vivencias:
Castigando y agrediendo, duda permanente?, con dificultades para aferrarse o soltar, sí pero no, cuál es su dinámica predominante?
Los dedos artríticos, reflejan una actitud de crítica y resentimiento, de acusar y castigar. De no ser amados lo suficiente, sintiéndose víctimas en las relaciones y la vida.
La terapia psicología es personalizada para cada sujeto, y añadiendo los factores comunes para superar estos daños. En general para las enfermedades de manos y dedos, al sujeto le conviene trabajar la faceta del perdón, y superar la dependencia. Permitirse no aferrarse al pasado que ya no le sirve. Desarrollar confianza en sí mismo, y crecer en seguridad y decisión que le permita coger y soltar de forma fluida: personas, experiencias y circunstancias.
En resumen, conseguir llegar a dirigir y manejar su vida satisfactoriamente y sus vivencias con alegrías y satisfacciones...