En este tipo de amor, predominan los sentimientos, las emociones, el erotismo, la seducción, todos los juegos que intervienen en el amor, eso sí la sexualidad y el mantener relaciones, tal vez pase a un segundo plano. El amor y romanticismo está muy cerca del arte y la estética.
La literatura, la poesía, la música, el baile, todo ello se convierte en el lenguaje que ensalza la admiración, la cercanía y fusión afectiva entre las dos personas románticas, que sueñan con el amor eterno.
Tiene la parte de herencia mítica, y muchas personas creen que así debería ser el amor, ensoñación y fantasía, dar la vida por la otra persona y vivir siempre pendiente, haciéndole todos los detalles posibles, y para siempre.
Es una realidad que los mitos son inventados, decepcionantes, falsos engaños, se ubican fuera de lo real y como tal imposibles de cumplir.
Y si hay algo totalmente cierto, es que cada persona tiene derecho a organizarse su vida, como mejor pueda y desee, por ello las personas que sueñan con el amor romántico y tienen una pareja que se lo pueda cumplir, enhorabuena.
Lo cierto es que el tema del amor romántico, en estos últimos tiempos ha dado lugar a un estudio profundo que implica un tipo de relación que con el tiempo incluso se llega al maltrato, la posesión, la sobreprotección, la anulación del sí mismo, y otros variantes personales de la dependencia amorosa.
Al fin esto son descripciones de vidas que ocurren y no son juicios de valor. Cada persona tiene derecho a sus preferencias y en el amor hay una gran libertad, la clave es que ambos estén de acuerdo.