Fatkini se denomina a una nueva tendencia de colgar fotos en Instagram y Twitter, de mujeres con unas curvas marcadas y vistiendo bikini o bañador.
Las personas que lo practican comunican en esas fotos vitalidad, optimismo, personalidad, alegría...
La tendencia es como una rebelión frente a la imposición de la delgadez, con la fuerza de representar a la mujer como es en realidad.
El objetivo es para ayudar a que las mujeres no vivan esclavas de la imagen, que incrementen su seguridad y autoestima.
Desean encontrar su espacio, diferente a los cánones establecidos.
Quieren transmitir la fuerte evidencia de que pueden ser sensuales, sexys y bellas.
En las pasarelas de moda este último año también hubo modelos de tallas más grandes.
Afortunadamente parece el fin de la moda en exclusiva de la delgadez, que tantos problemas psicológicos ha creado a tanta gente, como los trastornos alimenticios, entre ellos anorexia y bulimia.