martes, 16 de agosto de 2016

EDUCAR CON INTELIGENCIA


La mayoría de los padres se esfuerzan con pasión para educar a sus hijos, dedican tiempo y esfuerzo, y a veces necesitan dar un paso de objetividad para conocer mejor las estrategias que ya se ha demostrado funcionan mejor:

A los padres les conviene saber que los objetivos principales de la educación son preparar a sus hijos para la vida, con autonomía y responsabilidad, condiciones que les ayudan a evolucionar y crecer.

Por ello todas las acciones dirigidas hacia esos objetivos, son claves.

Combinar la vigilancia y los cuidados, sin darles sobreprotección. Hay que tener paciencia para permitirles una iniciativa, que experimenten primero. Si te lanzas en su ayuda demasiado pronto, les estás impidiendo realizarse.

Siempre que puedas, aplica lo que dices, no les puedes aturdir con mucha teoría, trata de darles menos lecciones y más ejemplo.

Premiar y regalar siempre y sin que se hayan comprometido, les impide valorar los beneficios del esfuerzo, calibrar las auténticas repercusiones del trabajo en la vida, con menos regalos materiales y más reconocimiento y valoración, así estarás cultivando los valores y especialmente el amor.

A los padres les conviene informarse y leer sobre psicología evolutiva para así conocer mejor las diferentes etapas de crecimiento por las que pasan sus hijos. Existen costumbres sociales que dejan mucho que desear, y seguir la rutina suele tener costes cuando se trata de educar con inteligencia.

No interesa copiar lo que esté de moda en un momento histórico determinado, sino elegir aplicar con inteligencia lo más valioso.

Tus hijos te lo agradecerán y tendrás un futuro más saludable. Los beneficios de la educación para el desarrollo de la responsabilidad son de agradecer. Aprenderán a funcionar solos...!

Las claves como padres que sois, es aplicarse para ayudarlos a ser personas responsables, maduras, autónomas e independientes. Que tengan una vida, la suya, sin que los necesiten. 

Y para la relación padres-hijos, ya permanece un lazo esencial, y es compartir el amor.