En la vida hay asuntos que dependen más de uno mismo, y hay otros en los que están involucradas más personas.
Cuando el resultado está en función del esfuerzo, el trabajo y la motivación de uno mismo, se puede conseguir un acercamiento más exacto al resultado deseado.
La panorámica cambia cuando uno se crea expectativas sobre asuntos que tienen que ver con otros, y es ahí cuando uno necesita volverse más flexible y tolerante para aceptar resultados que tal vez impliquen distancia de las expectativas creadas en un principio.
El hecho de rebajar ese nivel de expectativa creado en un principio, te permitirá diseñar los proyectos de grupo con más amplitud y realidad, incluyendo rendimientos tal vez algo dudosos.
Será un gesto más favorable para todos, esperar condiciones previstas, de lo contrario lo podrían considerar como fracaso y perder interés y motivación.