Las implicaciones que tiene el hecho de ser adulto, maduro, son múltiples, y muy favorecedoras para la persona.
Entre ellas, desarrollar un grado de objetividad suficiente para poderse analizar con perspectiva, poder verse a uno mismo de forma global, conjunta, y poder ser más equilibrado a la hora de las autovaloraciones.
Ser más maduro implica tener la humildad para aprender constantemente y descubrir los logros y tener la valentía y el reconocimiento para identificar errores y poder subsanarlos.
Y en línea con lo anterior, tener los horizontes más claros para tomar decisiones con seguridad y decisión.
Poder alinearse en la vida hacia los objetivos.
Ser maduro no implica precisamente ser más rígido, dogmático, serio, que son los prejuicios que mucha gente tiene, sino alcanzar más flexibilidad, adaptación a la vida, desarrollar más consistencia de personalidad, ser menos dependiente, alcanzar más autonomía y tomar la responsabilidad de su vida.
UN DESAFÍO...........!
TE ATREVES.................?