viernes, 20 de septiembre de 2013

PLAYING TO LOSE


En general el juego está configurado para que la gente pierda. Es un negocio. Las pérdidas de 15.000, 20.000, 30.000 € e incluso 40.000 o más, suele ser la cantidad que mueve a la gente a ir a terapia para esta Adicción. En algunos casos cuando los familiares se dan cuenta ha transcurrido ya mucho tiempo, meses o años.

Las personas que sufren esta patología de adicción al juego suelen haber tenido una trayectoria parecida. Les da un día por jugar unas monedas, ganan un algo y ahí comienza el enganche. Siguen jugando y perdiendo y algunas veces ganan. El ganar les va atando. 

El vicio se va instaurando en sus vidas y así después de ir perdiendo mucho, les entra la necesidad de recuperar lo perdido. Sacan el dinero de las cuentas de los familiares, agotan el suyo, y el de los hijos. Pueden llegar a robar a sus familiares, a compañeros en la empresa donde trabajan. 

A vender joyas que encuentren de su casa o de la familia. Le piden dinero a amigos. No pagan las deudas de la empresa. Mienten a su familia para sacarles dinero. Y así una escalada hasta que ya cayendo tan bajo y por imposición de los familiares deciden acudir a terapia.

Las vías de juego suelen ser maquinitas de los bares, apuestas y juegos en internet, salas de juego, etc... A veces cuando los padres se enteran, incluso esos hijos llevan meses sin ir a clase, abandonaron los estudios. 

O tienen muchas deudas si son adultos. En general se suelen despertar de este pesado sueño con mucha rabia y frustración, podían tener, dicen, un nuevo coche, moto, e incluso como cuentan algunos, un piso. Problemas en todas las direcciones. 

Como sugerencia a las personas que tengan cerca a familiares o amigos con esta patología, cuanto antes poner soluciones mejor.