"Ya que hoy he decidido aplicar algunos principios básicos que traen a la vida bienestar y felicidad. Alimentar pensamientos positivos, poniendo en mi mente todo lo que me da energía, satisfacción, bienestar y tranquilidad.
Cuando llegue algún pensamiento negativo a mi mente, despojarlo de su poder y decirme a mi mismo: son tonterías. Poner mi mente en lo que sí deseo, las actividades del momento. Recordar imágenes bellas, situaciones bonitas.
Pensar alegrías pasadas, en lo que sí se hacer, en las personas agradables que puedan existir a mi alrededor, en todo lo que esté agradecido en la vida. En elegir pensamientos de calma, de paz. Dedicar tiempo a estar solo conmigo mismo. Pensar lo que sí puedo ofrecer a los demás y así sentir mi contribución a lo social. Tiempo para meditar.
Imaginar mis objetivos y mis metas de futuro. Rodearme de personas positivas. Acordarme de reír, incluso de mis defectos. Relativizar los problemas".
Cuando llegue algún pensamiento negativo a mi mente, despojarlo de su poder y decirme a mi mismo: son tonterías. Poner mi mente en lo que sí deseo, las actividades del momento. Recordar imágenes bellas, situaciones bonitas.
Pensar alegrías pasadas, en lo que sí se hacer, en las personas agradables que puedan existir a mi alrededor, en todo lo que esté agradecido en la vida. En elegir pensamientos de calma, de paz. Dedicar tiempo a estar solo conmigo mismo. Pensar lo que sí puedo ofrecer a los demás y así sentir mi contribución a lo social. Tiempo para meditar.
Imaginar mis objetivos y mis metas de futuro. Rodearme de personas positivas. Acordarme de reír, incluso de mis defectos. Relativizar los problemas".
Todas estas reflexiones pertenecen a una persona que sufrió crisis de ansiedad y decidió ponerle solución. Eso contaba y así dirigía su mente y su persona cuando superó su ansiedad.
Ahora vive la vida con sus penas y alegrías, pero con un grado relativamente bajo de preocupación. Ahora disfruta la mayor parte del tiempo, gestiona sus problemas y cuando le toca llorar, no dramatiza tanto. Aprende y sigue adelante. Sí tiene más calidad de vida y es más feliz.