-Entre los factores causales que se le atribuyen, están los familiares, por ser el núcleo donde se nace y se crece. Familias desestructuradas, inestables, caóticas. Y en general porque también los progenitores pueden sufrir trastornos mentales graves, y claramente no están en disposición de atender las necesidades de sus hijos.
En un escenario así, puede ser frecuente el abandono en los cuidados de la infancia. Padres tan estresados y desestabilizados que tal vez no puedan establecer una organización vital saludable, sus interacciones con los hijos, de manipulación, acoso y agresividad. Amenazas y violencia.
Suele ser un grave problema cuando no se produce el vínculo del apego, y los bebés crecen sin un adulto de referencia con el que puedan crear los lazos emocionales. Este factor es también clave.
Incluso por situaciones de violencia sexual, como son los abusos sexuales, sobre un 70%, lo ha sufrido en la infancia.
Atentados importantes sobre la persona del niño, como ausencia de apoyo, castigos, marginación, ignorancia, sobreprotección o abandono.
Y otras veces aparecen en la familia cuadros de drogadicción y adicciones varias. Y los niños sufriendo las consecuencias.
-Los factores sociales que también pueden intervenir en esa desestructuración de la personalidad, están relacionados con movimientos sociales vacíos de valores humanos y normativas que puedan contener los límites del respeto hacia los demás, para que puedan crecer personas civilizadas.
-A su vez otros autores apoyan interferencias en la herencia genética, y diversas alteraciones en la biología del individuo.
-También existen casos de susceptibilidad cuando han ocurrido traumas en el nacimiento y estrés u otros problemas durante el embarazo y el parto, un niño más frágil soporta menos cualquier influencia negativa ambiental.
En resumen, se sabe que pueden intervenir en el desarrollo de las primeras etapas de la vida, en todo el conjunto de factores humanos como son los problemas multifactoriales. Ya que es evidente que las personas son seres neuro-bio-psico-sociales-espirituales, y por ello, al fin, existen inter-influencias de unos campos hacia otros.
En un escenario así, puede ser frecuente el abandono en los cuidados de la infancia. Padres tan estresados y desestabilizados que tal vez no puedan establecer una organización vital saludable, sus interacciones con los hijos, de manipulación, acoso y agresividad. Amenazas y violencia.
Suele ser un grave problema cuando no se produce el vínculo del apego, y los bebés crecen sin un adulto de referencia con el que puedan crear los lazos emocionales. Este factor es también clave.
Incluso por situaciones de violencia sexual, como son los abusos sexuales, sobre un 70%, lo ha sufrido en la infancia.
Atentados importantes sobre la persona del niño, como ausencia de apoyo, castigos, marginación, ignorancia, sobreprotección o abandono.
Y otras veces aparecen en la familia cuadros de drogadicción y adicciones varias. Y los niños sufriendo las consecuencias.
-Los factores sociales que también pueden intervenir en esa desestructuración de la personalidad, están relacionados con movimientos sociales vacíos de valores humanos y normativas que puedan contener los límites del respeto hacia los demás, para que puedan crecer personas civilizadas.
-A su vez otros autores apoyan interferencias en la herencia genética, y diversas alteraciones en la biología del individuo.
-También existen casos de susceptibilidad cuando han ocurrido traumas en el nacimiento y estrés u otros problemas durante el embarazo y el parto, un niño más frágil soporta menos cualquier influencia negativa ambiental.
En resumen, se sabe que pueden intervenir en el desarrollo de las primeras etapas de la vida, en todo el conjunto de factores humanos como son los problemas multifactoriales. Ya que es evidente que las personas son seres neuro-bio-psico-sociales-espirituales, y por ello, al fin, existen inter-influencias de unos campos hacia otros.