Las relaciones del pasado a veces dejan muy buenos recuerdos. Tal vez en su momento terminaron sin grandes tormentas, y repentinamente cuando menos se espera vuelven a la vida de uno.
Incluso con la pareja actual funcionando, puede convertirse en algo que la tambalea, porque suele ocurrir que la habituación y la falta de estímulos, la rutina, convierten a la pareja actual en un transcurrir aburrido.
Lo curioso es que la persona de entonces, ya no lo es, mucho habrá cambiado en ella, probablemente. Y tú, tampoco serás ya lo mismo, la vida en su transcurrir va transformando todo.
Y qué hay entonces...?... probablemente las asociaciones de la memoria, un cúmulo de experiencias de entonces, y sobre todo, los significados que le hayas atribuido a aquel momento de tu vida.
Recuerdos e ilusiones que hayas magnificado y fantaseado, aunque entonces no fueran tan buenas. Y otros recuerdos del tiempo pasado, si disfrutaste de más libertad, ilusiones, felicidades, alegrías.
Es probable que las parejas que vivan en un presente menos satisfactorio, anhelen aferrarse al pasado que consideran mejor.
Lo mejor es que ese pasado, ahora es difícil de recrear de nuevo, por aquello de que la vida cambia y las personas también.
Aún así, hay sujetos que están pasando por un momento en el que aprecian la llegada del antiguo amor, y se ilusionan mucho de nuevo. Incluso, abandonando a la pareja actual por la del pasado.
Y no siempre acaba mal, sencillamente compararon desde su óptica presente y se interesaron más por el ayer, y su admiración y capacidad de aferrarse a lo de antes, llegó a romper su actual pareja.
Es fácil que la actual no tuviera tanta consistencia como era necesaria, para sobrevivir a la embestida de la reaparición.
Y gradualmente, con llamadas y salidas, consiguieron eso, continuar con lo que ... quien sabe, igual nunca había muerto... su amor del pasado...vivo en el presente...