La función del sistema digestivo, entre otras, está relacionada con la alimentación, digestión y asimilación de los alimentos. Los síntomas y dolencias que se presentan en esta parte corporal, tienen que ver con la organización mental de ciertas creencias e ideas que la persona ha construido sobre el mundo y la vida, y van en contra de lo que representa un vivenciar saludable.
Los dolores, enfermedades y problemas que ahí se presentan, son una forma de llamar la atención de la persona, como un aviso para que cambie y modifique esos pensamientos que tiene que le perjudican en el día a día.
Si en un plano metafórico el estómago digiere las ideas, las enfermedades se presentan por exceso de miedo, dificultades e incapacidad para asimilar lo nuevo, en función de cada caso, las angustias que le estén creando situaciones imprevistas o novedosas para ella.
Tanto a nivel personal, laboral, relacional. Los avances mentales de esa persona con patología digestiva tienen que encontrar un camino hasta llegar a creer que puede asimilar la vida con facilidad, que asimila las circunstancias, que la vida le sienta bien.
Recuerdo el caso de un paciente en consulta que llevaba unos tres años visitando médicos especialistas de digestivo, que una y otra vez la estaban realizando pruebas y no aparecía ningún dato. Incluso endoscopias, de todo. Hasta que finalmente se puso en tratamiento psicológico, fue organizando su vida de trabajo y relaciones y progresivamente todos los síntomas de digestivo desaparecieron.
El tiempo que estuve investigando en un hospital sobre las enfermedades de digestivo y el estrés, en concreto como afecta el estrés sobre patología como la gastritis, úlceras, síndrome de intestino irritable, entre otras, siempre aparecía en la historia clínica, gran problemática de ansiedad, angustia y depresión.
En la época actual que ya se sabe con tantas investigaciones que lo corroboran, cómo afecta la mente sobre el cuerpo, tanto para crear enfermedades como para sanarlo, la vía optima para atender a los pacientes estaría dirigida por evaluar cómo está su mente, sentimientos y emociones, antes de recetarle cantidades de medicación y no ir esencialmente a las causas que están generando esas enfermedades. Y por supuesto una vez causada la lesión sí se precisa de la medicación para curarla.
En general en estos casos, cuando la enfermedad de digestivo se manifiesta existen otras múltiples complicaciones en la vida. Lo mejor de todo: Hoy hay solución!