sábado, 20 de septiembre de 2014

BULLYING, EL AGRESOR / THE AGGRESSOR


El alumno que inicia el proceso de acoso, que se busca un grupo de apoyos y el que lo mantiene, como cabecilla del plan, suele ser una persona con trastornos de personalidad y comportamiento. En muchas ocasiones una personalidad antisocial.

Es un perfil intimidante, desafía, provoca, es cruel. Un problema importante y limitante para él mismo, es la falta de empatía, probablemente le llevará a tener muchas carencias y situaciones difíciles.

Es fácil que sea un aprendizaje ya familiar, donde les es difícil compartir un amor incondicional, con escasa exteriorización de los sentimientos y en general poco cariñosos.

Su felicidad está en sentir el mando y el poder sobre otros, y con frecuencia lo ejerce con compañeros que percibe más frágiles, con baja autoestima y escasa confianza en sí mismos. No tiene la personalidad suficiente para actuar así con personas que considera más fuertes.

Es incapaz de desarrollar amistades sanas, manipula, domina, seduce a los compañeros para utilizarlos como apoyos para el bullying.

A veces ha sido también víctima de abusos familiares, y es posible que viva en una familia con problemas, donde haya sido humillado y su autoestima atacada. También puede ocurrir que no se haya sentido querido y no haya desarrollado su "yo" personal, generando por ello una envidia y frustración constantes, al ver otros sujetos que sí disfrutan con los temas sencillos de la vida. Eso le suele causar una profunda frustración y rabia, uno de los factores desencadenante del acoso.

Y especialmente, siendo autoritario, mentiroso, intolerante, impulsivo y agresivo, le place sentir su poder ejerciendo sobre la víctima acciones dirigidas a destruir, dañar y perjudicarla, atacando de forma despiadada a su persona e incluso su imagen pública.

Los modos y estrategias más frecuentes para conseguirlo, son, generando rumores, nombrándoles despectivamente, les ofenden y se ríen de ellos a la cara, con motes o insultos, les someten intentando que hagan lo que les mandan, les humillan y desprecian, destruyen sus cosas o sus ropas, les molestan continuamente, len engañan, a veces les ponen zancadillas, o empujan, golpean. Les hacen burla, gestos y se dirigen a ellos humillando. Se distancian y hacen burla como si les fueran a infectar, o como si oliesen mal.

En general en un proceso de acoso escolar, suelen utilizar el conjunto de acciones destructivas, como el bullying verbal, el no verbal, el psicológico, el físico, el social, el ciberacoso, el sexual. Durante todo el proceso destructivo, van teniendo acciones malvadas, en todas las direcciones.