El pensamiento lateral alude a una serie de estrategias y técnicas para resolver problemas de una forma no estandar, no lógica o que no sigue la vía utilizada normalmente.
El autor que lo propuso fue Edward de Bono en 1967. Su aportación implica la consideración de las situaciones desde perspectivas diferentes, buscando innovación y soluciones nuevas. En las empresas y reuniones de formación en psicología social se utiliza una aplicación de este pensamiento lateral, "el brainstorming", una forma de generar otras respuestas y soluciones.
Entre las estrategias que utiliza el pensamiento lateral, es protagonista la imaginación y creatividad e incluso el pensamiento lógico con la comprobación de suposiciones; también se valora especialmente la formulación de las preguntas más apropiadas, brillantes (esto se utiliza en coaching) y diferentes, para estimular el pensamiento en amplitud y así siga otro tipo de heurísticos y no los recorridos habituales, llegando a soluciones inteligentes.
En resumen, analizar situaciones y acontecimientos, problemas y vivencias desde todos los niveles diferentes a los acostumbrados. Como ejemplos del pensamiento lateral en la vida cotidiana son las Terapias Psicológicas, la dinámica del reciclaje de materiales, etc... y otros muchos que se viven en la actualidad en las vanguardias de la ciencia, tecnología, biotecnología...
Y tiene sus beneficioso resultados, como decía Einstein no hay problemas irresolubles sino mal formulados