No es preciso llegar a situaciones tan extremas como los niños que viven en instituciones, según investigaciones realizadas en el Hospital Infantil de Boston (Sheridan, M. y Nelson Ch). En las cuales se evidenciaba que las negligencias psicológica y físicas ejercidas contra ellos, les producía disminución de la materia gris y blanca en el cerebro.
Se demostró cómo la adversidad en la niñez, tiene consecuencias fatales para el desarrollo del cerebro, y en consecuencia afecta al conjunto de la persona.
Sheridan, Nelson y cols. también señalaron deterioro en niños expuestos al abuso, el abandono, la violencia, la pobreza y otros dramas.
Por todas las investigaciones anteriores y posteriores, se conoce también que la deprivación social en los niños, interfiere globalmente en su aprendizaje y procesamiento cognitivo (reducción de su inteligencia), y causa importantes trastornos afectivos, en los sentimientos.
Y son muestra de ello, autores como Rene Spitz (1.887), depresión anaclítica, síndrome de hospitalismo. Vigotsky (1.896), con su teoría del aprendizaje sociocultural de cada persona, y la importancia del medio donde se desarrolla.
Lo esencial en estos casos es, no solo considerar las investigaciones como algo puntual en un contexto preciso, sino sobre todo entender que los niños necesitan de la interacción con sus adultos desde pequeños, y gradualmente con la participación para el enriquecimiento de su persona, en las relaciones con los demás.
La esencia para el verdadero "aprender y saber", se obtiene con las ejecuciones, con el hacer.
Y teniendo en cuenta que los adultos al fin, son niños que han crecido, también les afecta fundamentalmente el aislamiento, el vivir la mayor parte del tiempo desconectados de una mínima y aceptable interacción social.
La riqueza en las relaciones, interactuar con diferentes personas y contextos, dota al sujeto de una asimilación sobre sus "iguales", u "otros referentes", que le ayudan a entender el mundo y a "sí mismo".
Le ayudan a relativizar su particular vida y a objetivizar sus experiencias, permitiéndole salir de su puntual perspectiva, a veces que no va más allá de su propio ombligo, por así decirlo.
Cómo una persona que no interactúa con otros puede entender de respeto, libertad, autonomía, responsabilidad, empatía, comprensión, tolerancia, compasión, amor...?
La interacción social dota al individuo de diversidad de estrategias que posibilitan su autorrealización, y le permiten establecer en su contexto vital, las transaciones óptimas, al formar parte de la red social establecida.
El aislamiento empobrece y genera deterioro, en multiplicidad de niveles, y sobre todo en el plano de la acción, interacción, y ejecución de los componentes de la inteligencia social y habilidades sociales.
Y las repercusiones también deterioran su mundo afectivo y emocional, y por ello se convierte en importantes problemas nucleares en el sujeto que lo sufre. Se convierten en personas más pobres.
Por eso interesa que la gente, si lo desea, crezca y evoluciones, multiplicando sus interacciones sociales, con personas de diversidad multicultural. Ello le permite ampliar horizontes, expandir su mente, y transformarse en una persona más respetuosa, más sabia y más feliz.