Lo que puede diferenciar claramente una adicción a las compras, es que la persona tiene:
-Sentimientos de culpa por haber realizado las compras.
-Descontrol de impulsos y ausencia de lógica y razones para las compras. Con desorganización en el momento de comprar, como adquirir objetos, ropas, bolsos, zapatos, teniendo ya de todo. Por el mero hecho de comprar. Aunque después no lo use.
-Pensamientos intrusivos, ideas obsesivas que invaden al sujeto, incitándole a la compra compulsiva. El problema principal es que no puede controlar su comportamiento. Aunque ya tenga treinta camisetas en casa, tiene que seguir comprando más y más.
-Suele iniciarse en la preadolescencia o adolescencia, yendo en la mayoría de los casos a más.
-A veces gastan todo el dinero que tienen en ropa, e incluso se endeudan, o llegar a robar dinero a su pareja o familiares para seguir comprando.
-Cuando no se detecta a tiempo, y se ponen soluciones, puede a su vez generar importantes conflictos familiares y de pareja.
A su vez este problema de salud mental, puede estar presente en la persona junto a otros como los trastornos obsesivo-compulsivos, anorexia o bulimia, cleptomanía, depresión mayor, entre otros, como adicciones a sustancias legales, como alcohol y medicamentos, o adicciones a sustancias ilegales.
Lo importante es que los familiares lo detecten a tiempo y ayuden a la persona enferma a curarse, solicitando una terapia psicológica. El posible riesgo, es que forme parte de la persona como un componente de su personalidad.
Cuando se deciden a solucionarlo acudiendo a consulta psicológica, suele en general tener resultados satisfactorios.