Los encuentros a veces se producen de forma radical: las redes sociales. Conviene estar concentrados y sobre todo sin prisa.
Si deseas tener éxito, acompañarte de paciencia es la clave. En cuanto le metes prisas a una mujer puede que desaparezca. Es normal que la gente necesite su tiempo para observar, pensar y conocer.
El asalto es mejor para otras ocasiones, no para la primera cita.
Cuanto más cómoda se sienta ella, mejor fluirá la relación, puedes permitir que marque los tiempos.
La cita puede diseñarse en un lugar que permita la conversación, los empujones y gritos en la oreja que puedan ocurrir en una discoteca, tal vez en otro momento.
Una fuente de ideas para la conversación pueden ser los temas que hayas observado sean de su preferencia en las redes sociales. Pero cuidado, sin pasarse, a veces si muestras saber mucho de ella, sin que te lo haya confesado en directo, puede hacerla pensar que eres muy controlador. Eso puede molestarla, y mucho.
Cuando eres precavido y escuchas lo que ella te cuenta y lo que realmente desea compartir en directo, vives en el presente y se sentirá atendida y escuchada. Ganas puntos.
Ten presente que las personas que hablan mucho de sí mismas, parecen narcisos, egocéntricos, y pueden aburrir. Es preferible atender a sus intereses y preguntas, así puedes satisfacer su curiosidad en el momento preciso.
No agobies con planes de futuro, todo irá surgiendo, sencillamente pensar en la siguiente cita, y ya irás viendo.
No conviene ponerte en plan criticón, y menos con la ex. Algunas mujeres se pueden sentir identificadas con la ex y puede que se vuelvan comprensivas con ella y se pongan en contra tuya.
Procura evitar lo siguiente: no vayas de presumido hablando del coche, la moto, el quads, el dinero, y lo superlisto que eres. Eso le sirve a ella para pensar que eres muy inseguro.
Para conseguir una primera cita favorable, interesa que seas tú mismo, en lo que puedas, imítala y sobre todo algo que todas las mujeres desean: hazla reír. Ten paciencia y observa.