Tal vez sí, te hace falta y te interesa.
Observaste que tu primera relación, ella se enamoró de ti, por qué no ser claros...!, por tu dinero? A ella le gustaban los viajes, tus regalos, tus cenas, en conjunto, la vida que tú le ofrecías, y ella estaba feliz, viviendo así.
Hasta que conoció a ese otro, amigo, que fue calando en sus sentimientos y ese sí la enamoró. Y se fue de tu vida.
Después del primer golpe de amor, llegó la segunda oportunidad, o lo que tú creíste que era, tu segundo amor.
Así vino la boda, las fiestas, los viajes y otra vez más en un breve tiempo, se fue desmoronando. Muy duro, muy doloroso. El dolor llegó...Ella se marchó de tu vida...
Algunos dicen que el amor ni ve, ni oye ni entiende. Tú en realidad lo has vivido. Es así de real. Te enamoras y no sabes quién es ella, antes de pensarlo, ya estás pillado.
Las emociones y los sentimientos que produce son tan fuertes, que a muchas personas es como si les dejara "tocados". Su mente entra en un grado de turbulencias y son incapaces de articular razonamiento alguno.
No es broma, es un grave problema, y el autor Walter Riso, lo recuerda (Manual para no morir de amor).
Bajo esa brillante luz del enamoramiento, se impide percibir el alcance de las limitaciones del "otro". La gente piensa que con el tiempo cambiará, siempre piensan que "para mejor", y lo más frecuente es "a peor".
Lo inteligente en estas situaciones de enamoramiento ciego, con el consiguiente cáos mental que produce, es tratar de elaborar un análisis lógico y racional. objetivo.
Es decir entrar en proceso de enfriamiento y meditación y reflexionar si conviene en la vida de uno o no.
Aprender a "sentir" con las razones, y pensar con el corazón. Necesaria esa integración de las dimensiones del ser. Hoy mucha gente sabe que el amor mata, sí a disgustos muchas veces.
Que por amor hay gente arruinada.
Que por amor hay mucha gente que es víctima del maltrato, abuso emocional y violencia doméstica.
Gente que se apartan de su verdadera vocación por seguir a la pareja a otro lugar, abandonando su trabajo.
Otros se enfrentan a sus padres y familiares porque les caen mal a su pareja...! Y al fin acaban en divorcio...
Y más y más escenarios dramáticos..., todo en nombre del amor...?
Tal vez del amor ciego, que cayó en una relación más imaginaria que real, que obedecía a las expectativas que tenía cada uno de la pareja y que lo que entendían como amor era una mezcla, una confusión de emociones...